lunes, 14 de noviembre de 2011

Yes, you can.

Nada es fácil si no luchas por ello. Sí, eso os lo habrán dicho vuestros padres mil veces, y vosotros os lo tomáis como una broma, pero hablan completamente en serio. Una vez se os haya escapado de las manos esa tremenda oportunidad, os hundiréis, desearéis retomar aquel momento una y otra vez, pero como se encuentra escrito, la vida no es un ensayo de otra que vivirás dentro de un tiempo. Esta es tu oportunidad. ¿Por qué no la aprovechas? Yo lo estoy haciendo, pero precisamente hoy, ando de bajón. Esa sensación de la que te sientes completamente inútil, sin recursos para no decepcionar a tus mayores, o a los expertos, incluso a tus mejores amigos. Todo es difícil, la vida es difícil de afrontarla, pero hay que echarle un par de huevos. Persigue tus sueños pase lo que pase. Gana enemigos, amigos, amores varios, y cuando llegues al clímax, pega un grito, como si estuvieras en la montaña más alta del mundo, como si quisieras hacer puenting por ahí. Grita, demuestra todo tu potencial, todo lo que vales, lo importante que eres para unas personas, y lo mucho que odias a otras, y desahógate con el mundo. Entonces, cuando caigas, sentirás que todos los males se esfuman, se deterioran en el aire, bajo la velocidad establecida. Cuando caigas, sentirás una presión muy grande en la barriga, pero habrá merecido la pena. Keep calm, and love you. 

martes, 25 de octubre de 2011

Mucho es nada.

No sé cómo en tan poco tiempo me pasen tantas cosas.


Pero aún sigo exigiendo más. Intento buscar el lado más interesante a mi vida, renunciando mis hábitos, intentando cambiar después de milésimos tópicos. Digamos que esa época de bullying de la que vivía hace cuatro años se esfumó, hasta la vista, baby. Ahora tengo poder, soy capaz de afrontar las cosas y decírselas a la cara. No me siento importante, pero moralmente superior. 


No tengo más que escribir, sólo agradecérselo a él. Y a mis amigos, y a todos. Con amor no siempre puedo expresar lo que siento, también hablo de términos mayores.

viernes, 30 de septiembre de 2011

El destino no siempre es duro...

... es difícil de afrontar. 


El destino hace que te conviertas en una persona fuerte, no intenta nada malo, aunque sin querer, hace que la gente hagan cosas malas para que aprendan de los errores que conllevarán tiempo después. El destino te enseña a vivir el momento, que no vuelva a repetirse el mismo error, que de ese mismo error planifiques una posible vida. El destino hace que los demás no influyen en ti, que esas personas se bufen de ti, cual bufón de corte. El destino no sería en la vida capaz de aguantar esas idioteces, y contraataca. Con una palabra, con un gesto, con un pensamiento, o simplemente, te limitas a ignorarle.


El destino os ayuda a comprender que lo que dice vuestros mayores es verdad, más que la verdad, es la realidad. El destino quiere ser tu aliado, no existe buena o mala suerte, tampoco existe el karma, y mucho menos el fen-suí, o como quieran decirlo. Siempre que puede, te trae lo mejor de la vida en cualquier ocasión, mas tú tendrás que renunciar, decir que no, para ser feliz. Porque de eso se trata, que no te conformes con lo que te den, que vayas hacia más. 


Y ahora mismo, el destino te ha guiado a leer esta entrada, que quizás te haya servido de mucho o de nada. Pero he aquí una pregunta: ¿Por qué escribo esto? Pensarás. Lo hago por tu bien. Por el bien de ti, y de tu destino.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Yo nací de esta manera.

Mido uno setenta y seis. Soy tan delgado que casi cruzo la barra de anorexia, comiendo como un maldito oso polar. Tengo los ojos verdes. No verdes amarronados o marrón verdosos, los tengo verdes porque lo digo yo. Mi pelo es rizado, como una bonita escarola. ¿Pues sabes qué? Mi escarola me gusta, no como tu cresta de papagallo. Soy torpe al andar, pero no es por indecisión, sino que soy feliz y lo hago. No soy tímido, solo quiero ocultar un par de verdades que si te las dijera a la cara cambiarías para bien, y quiero que sigas siendo el mismo miserable de siempre. No invento vidas y tampoco gustos. Mi música es la de los demás, quien quiera compartir mis gustos, adelante, quien no, pues nos vemos en el cielo. Defiendo mis ideales, también a mis amigos. Y ché, cuando digo amigos, son amigos, personas que muestran confianza junto al otro y viceversa, no los pelotas que dicen lo guapo que eres para coger cacho en una noche. No soy marica, pero si sigues diciéndolo, a lo mejor me convierto en eso. ¿Que será culpa tuya? Bueno, nada es bueno en esta vida, y las culpas, de una manera o de otra, no siempre serán para mi. Soy culto al hablar, mis únicas palabras en el diccionario no son "acho, me da lache", quizás algo por delante de lo trascendental, como diría mi profesor de Filosofía. Juzgo a la gente, pero en voz baja, no vaya a ser que les guste que diga más cosas. 

¿Termino aquí? No, hay un largo etcétera que no podría escribirlo en un blog. Pero podría resumirlo en una famosa canción, compuesta y cantada por una increíble Mother Monster: "I was born this way".

miércoles, 21 de septiembre de 2011

This ain't a goodbye, maybe one "See you Soon".

No me han atropellado, tampoco me han atravesado con una daga, ni siquiera me han disparado con un revólver. No te asustes al verme en el suelo con los ojos cerrados. Tampoco te asustes si en ese momento lo deje para irme a un lugar mejor. No fue tu intención, fue la mía. La intención de suicidio, fue mía. Soy culpable de todo daño que me he producido con mis propias manos, o con mi fuerza de voluntad. Quería decirte un "te quiero" antes de palmarla, pero no me da tiempo ni para eso, pero desde un cielo, un infierno, un Edén o una oscuridad inmensa y total puedo decirte: Nos veremos. Nos veremos muy pronto, será tan rápido que ni siquiera te habrás dado cuenta. 



martes, 20 de septiembre de 2011

Exactly.

Piénsalo. Tienes una vida de puta madre, te dan todo lo que quieres, tienes amigos que no se pueden contar con los dedos de una mano, tienes privilegios de hacer lo que tú quieras, pero por favor, no digas en la vida que tu vida es injusta, porque ya me gustaría a mi tener una vida como la tuya. Y muchos pensarán lo mismo que yo, ¿por qué? ¿Es que la respuesta no es obvia? Te envidian, porque ellos sufren por sobrevivir día a día con una serie de problemas que a este ritmo tú nunca tendrás jamas. Y como buena persona que soy, espero que no te pase. Pero sé consciente en todo momento, no todo es perfecto en tu mundo de color rosa, como la de cualquiera, pero fíjate todo lo bueno que te rodea. ¿No tienes amor? ¿No tienes una personalidad? ¿No tienes amigos? 




... Piénsalo. Eres tú esa persona que se complica la vida. 

sábado, 3 de septiembre de 2011

Impotencia.

¿Qué he hecho? Es la pregunta del millón.

¿Por qué? Bueno, es bastante obvio. Que no te lo quiera decir, que esté insistiendo pero que esa persona pase hasta el soberano culo de mi presencia, de mis ganas de decirle: Joder, si ha pasado algo, dímelo, podemos hablarlo. Pero no, cabezota de por sí. ¿Pues sabes qué? Ya estoy harto de chuparte el puto culo.

Ah, y hablando de chupar culos, en este preciso momento voy a dejar de hacerlo. Voy a pasar de toda persona que se me acerque, de todo aquel que quiera saber algo de mi, de todo. ¿Lo deletreo? Okey, T-O-D-O. ¡Por favor! ¡Que los malos de la película solo existen allí, en las películas! ¿Y qué si no vas a leer nunca esto? ¿Acaso me importa? Yo ya lo he intentado, estoy harto. 

¿Qué? ¿Ahora qué pensáis de mi vida? ¿Que es perfecta? No, queridos lectores, no todos tenemos una buena vida. Siempre nos falta algo, un poquito de piel, o un poquito de cabeza, o lo que sea. Pero lo que nos sobra es razón, y toda persona es incapaz de decir que no tengo razón en lo que he escrito, porque las verdades son duras como las piedras, y algunas veces, te las tienes que tragar.

Como bien dirían en los juicios, mi alegato ha terminado.